2-C4
Descripción de capas
El manto
capa de rocas de gran potencia que se sitúa bajo la corteza
terrestre y la separa del núcleo. El manto se extiende desde los 35-45
kilómetros hasta los 2.900, lo que significa aproximadamente la mitad del radio
de la Tierra. El Manto constituye el 83 % del volumen total del planeta y el 67
% de su masa. El Manto está compuesto por silicatos de magnesio y hierro,
siendo su composición la de las rocas peridotíticas. El Manto se presenta en
estado sólido a excepción de una delgada capa que se sitúa entre los 70 y 250
kilómetros que recibe el nombre de Astenosfera o capa de baja velocidad. A
mediados de los años 90 algunos científicos sugirieron que la Astenosfera
podría no existir. En regiones bajo la
corteza las rocas están parcialmente fundidas desarrollándose procesos
convectivos como consecuencia de la aparición de anomalías térmicas -puntos
calientes- que determinan un movimiento que desplaza las capas litosféricas
propiciando la aparición de rift y de zonas de subducción, bordes constructivos
y destructivos, respectivamente. Bajo las dorsales oceánicas el material del
Manto asciende y da lugar a la aparición de un volcanismo cuyos productos
forman nueva corteza que se expande lateralmente -expansión oceánica- a expensas
del movimiento convectivo de las rocas fundidas. En los bordes destructivos las
placas corticales confrontan a diferente velocidad y subducen, dando lugar a
procesos de generación de magmas con la aparición de un volcanismo asociado a
los arcos insulares y a zonas de borde continental. Las zonas de subducción,
como consecuencia de las fuertes tensiones acumuladas, son áreas de alta
sismicidad. La densidad del Manto aumenta con la profundidad, pasando de 3,5
g/c3 en la superficie a 5,5 g/c3 en las proximidades del núcleo.
Manto inferior
El manto inferior representa
el 55 por ciento en volumen del planeta, y se extiende entre los 670 y los
2.900 kilómetros de profundidad, limitado por la Zona de Transición (por
arriba) y la frontera entre el núcleo y el manto (por debajo). Las presiones en el manto inferior comienzan en 237.000 veces
la presión atmosférica (24 gigapascales) y llegan hasta 1,3 millones de veces
la presión atmosférica (136 gigapascales) en la frontera entre núcleo y manto.
La teoría más aceptada ha sido
que, en su mayor parte, el manto inferior está compuesto por un único mineral,
comúnmente llamado perovskita. Se pensaba que la perovskita no cambiaba su
estructura en todo el vasto rango de presiones y temperaturas presentes en el
manto inferior.
Experimentos recientes
recreando las condiciones del manto inferior mediante el uso de celdas de
yunque de diamante calentadas por láser, a presiones entre 938.000 y 997.000
veces la presión atmosférica (95 y 101 gigapascales) y temperaturas entre 1.900
y 2.100 grados centígrados aproximadamente (entre unos 3.500 y 3.860 grados
Fahrenheit), revelan que la perovskita con contenido de hierro es inestable en
el manto inferior.
Corteza terrestre
Se conoce como corteza
terrestre a la capa más superficial del planeta tierra, su espesor varía de 5
km, en el fondo oceánico y 40 km, en las montañas. Entre los elementos más
característicos que conforman esta estructura se cuentan el silicio, el
oxígeno, aluminio y magnesio. En tanto, en esta, a su vez, se distinguen tres
capas: la sedimentaria, granítica y basáltica. Por el lado de la sedimentaria
está compuesta por rocas sedimentarias que se encuentran solo en los
continentes y en aquellos fondos próximos al continente.
En el caso de la granítica,
las que la componen son rocas similares al granito que formarán la masa madre
de aquellas zonas continentales emergidas. Entre esta capa y la siguiente se
ubica la discontinuidad de Conrad, que indica los límites entre la granítica y
la basáltica y por último, la basáltica, está conformada por rocas parecidas a
los basaltos, esta es la capa inmediatamente continúa a la tierra y la
discontinuidad de Mohorovicic la separa del manto.
La corteza terrestre se divide en dos tipos, la oceánica y
la continental. La oceánica representa el 75 % de la superficie del planeta
tierra, es mucho más fina que la continental y en ella se reconocen tres
niveles. El nivel más inferior o nivel III está conformado por gabros, rocas
plutónicas básicas y linda con el manto de la discontinuidad de Mohorovicic.
Sobre estas rocas se erige el nivel II de rocas basaltos, con la misma
composición que la anterior, luego se extiende una zona inferior compuesta por
diques y la zona más superficial de este nivel está conformada por basaltos almohadillados,
que se formaron como consecuencia de la solidificación de lava con agua
oceánica. Y sobre los basaltos, entonces se erigirá el nivel I, formado por
sedimentos.
Y la continental ostenta una
naturaleza menos homogénea y densa que la anterior por eso se ubica encima de
la oceánica, ya que entre su composición se encuentran rocas que provienen de
diversos orígenes, como ser las ígneas ácidas como el granito, acompañadas por
una importante masa de rocas metamórficas.
3-C4
¿Qué saben sobre la novela de Julio Verne?
“El profesor Lidenbrock
pretende seguir los pasos de Saknussemm, y emprende una expedición acompañado
por su escéptico sobrino Axel y el impasible guía islandés Hans. El grupo
ingresa por un volcán hacia el interior del globo terráqueo, en donde
vivirán innumerables peripecias, incluyendo el asombroso descubrimiento de un
mar interior y un mundo mesozoico completo enterrado en las
profundidades, así como la existencia de iluminación de carácter eléctrico. En
esta novela, Verne utiliza uno de los inventos existentes en la época: la
lámpara del minero, creada por los físicos franceses Dumas y Benoît a partir de
la bobina de Ruhmkorff y del tubo de Geissler. Es infundada,
pues, la idea de que fue el mismo Verne quien inventó esta fuente muy luminosa.”
¿Es posible hacer?
explica
No es posible taque en primera
los volcanes aun sean inactivos en su interior cuentan con lava, o gases que no
permiten que el hombre pudiera siquiera poder acercarse al interior aparte que
la tierra tiene muchas capas antes de llegar al centro de la tierra la cual
tiene un núcleo, aparte que la falta de oxígeno no permitiría llegar muy lejos.
4-C4
¿Que son las placas
tectónicas?
Las placas tectónicas son
aquellas porciones de litósfera que se ubican debajo de la superficie o de la
corteza terrestre del planeta. Son de material rígido y se ubican sobre la
astenosfera, una porción del manto terrestre mucho más profundo y complejo. Las
placas tectónicas se encuentran encastradas unas contra otras y aunque son
rígidas, no están sostenidas más que por la unión de unas con otras, por lo
cual su movimiento es permanente y muy evidente o claro en algunas regiones del
planeta. En la mayoría de los casos, el movimiento o desplazamiento de las
placas tectónicas es milimétrico y no se siente en la vida cotidiana de las
sociedades. Cuando estos movimientos se hacen evidentes para el ser humano
debemos hablar de fenómenos tales como sismos, terremotos, tsunamis, etc.
Muchas veces su movimiento también puede poner en acción a volcanes.
Hay dos tipos de placas
tectónicas en nuestro planeta: las oceánicas y las mixtas. Mientras las
primeras (que son las más extensas debido a la gran cantidad de agua que existe
sobre la superficie de la Tierra) son aquellas que subyacen a los océanos, las
mixtas pueden combinar en su superficie tanto océanos como superficie
continental. Estas últimas son las más numerosas ya que encontramos muchas más
bien pequeñas, pero en suma de extensión las primeras ocupan la mayor parte del
territorio planetario.
Para una mayor eficacia en su estudio, los especialistas han dado nombres diferenciados a cada una de las placas aproximadamente a fines del siglo XX. Así, podemos hablar de la Placa Antártica (la más grande de todas y aquella que subyace al sur del planeta), la Placa del Pacífico, la Placa Norteamericana, la Placa Africana, la Placa Australiana, la Placa Sudamericana, la Placa Euroasiática y otras menores que unen a las más grandes entre sí.
El permanente movimiento y desplazamiento de algunas de estas placas se puede observar en el relieve de la corteza terrestre. Así, los lugares con cadenas montañosas o con territorios más elevados son aquellos que han sufrido hace millones de años el choque o la superposición de dos placas que terminó con la aparición de elevaciones terrenales. Es por esto que regiones como la costa oeste del continente americano o la zona del sudeste asiático suelen enfrentar numerosos terremotos, tsunamis y sismos causados por la permanente acción de las placas que subyacen a su superficie.
Para una mayor eficacia en su estudio, los especialistas han dado nombres diferenciados a cada una de las placas aproximadamente a fines del siglo XX. Así, podemos hablar de la Placa Antártica (la más grande de todas y aquella que subyace al sur del planeta), la Placa del Pacífico, la Placa Norteamericana, la Placa Africana, la Placa Australiana, la Placa Sudamericana, la Placa Euroasiática y otras menores que unen a las más grandes entre sí.
El permanente movimiento y desplazamiento de algunas de estas placas se puede observar en el relieve de la corteza terrestre. Así, los lugares con cadenas montañosas o con territorios más elevados son aquellos que han sufrido hace millones de años el choque o la superposición de dos placas que terminó con la aparición de elevaciones terrenales. Es por esto que regiones como la costa oeste del continente americano o la zona del sudeste asiático suelen enfrentar numerosos terremotos, tsunamis y sismos causados por la permanente acción de las placas que subyacen a su superficie.
La teoría de la deriva
continental Se llama así al fenómeno por el cual las placas que
sustentan los continentes se desplazan a lo largo de millones de años de la
historia geológica de la Tierra.
Este movimiento se debe a que
continuamente sale nuevo material del manto por debajo de la corteza oceánica.
Así, se crea una fuerza que empuja las zonas ocupadas por los continentes (las
placas continentales) y las desplaza.
En 1620, el filósofo inglés
Francis Bacon se fijó en la similitud que presentan las formas de la costa occidental
de África y oriental de Sudamérica, aunque no sugirió que los dos continentes
hubiesen estado unidos antes.
La propuesta de que los
continentes podrían moverse la hizo por primera vez en 1858 Antonio Snider, un
estadounidense que vivía en París.
5-C4
La teoría de la tectónica de placas
¿Qué son los limites
convergentes?
Un borde convergente o
destructivo es el borde de choque entre dos placas tectónicas. Cuando en el
borde convergente una de las placas de la litosfera se hunde debajo de la otra
consumiéndose en el manto se habla de subducción. Este tipo de bordes lleva a
la formación de cordilleras y está asociado con zonas de actividad volcánica y
sísmica originadas por la fricción de las dos placas.
Convergencia
oceánica-continental
Una placa con corteza oceánica
colisiona con una placa con corteza continental la cual, al ser más ligera,
"flota" sobre la oceánica que se hunde (subduce) en el manto. Al
alcanzar una profundidad de unos 100 km se desencadena la fusión parcial, que
origina un flujo ascendente de magma (roca fundida) que origina plutones y
volcanes que crecen sobre el continente. Se forman así arcos volcánicos
continentales y grandes fosas oceánicas, ambos paralelos a la costa. El punto
de intersección de las dos placas se llama zona de subducción y allí se forma
una fosa oceánica donde se van acumulando sedimentos en una estructura llamada
prisma de acreción.
Este tipo de borde convergente
es el que se da en la costa pacífica de América del Sur, donde la Placa de
Nazca, totalmente oceánica, deriva hacia el este y colisiona con la Placa
Sudamericana que deriva hacia el oeste; el magma ascendente ha formado la
Cordillera de los Andes, con cientos de volcanes activos y una intensa
actividad sísmica.
Convergencia oceánica-oceánica
Dos placas con corteza
oceánica colisionan. Una placa subduce bajo la otra iniciándose la fusión y la
actividad volcánica como el la convergencia oceánica-continental; los volcanes
crecen desde el fondo oceánico originando cadenas de edificios volcánicos que
emergen como islas, conocidas como arco de islas volcánicas. Estos arcos están
situados a 100-300 km de la fosa submarina que se forma en el punto de
subducción. Son ejemplos de archipiélagos originados así las Aleutianas, las
islas Marianas, Tonga, Japón y las islas de la Sonda, y las fosas asociadas a
ellos.
Convergencia
continental-continental
Cuando una placa oceánica en
subducción contiene también litosfera continental, la subducción continuada
acabará uniendo los dos bloques continentales que, dado que ambos flotan en la
astenosfera, colisionarán. Ello pliega y deforma los sedimentos acumulados a lo
largo del margen continental originando una nueva cordillera compuesta por
rocas sedimentarias y metamorfoseadas.
Este tipo de fenómeno se
produjo cuando la India "embistió" Asia y produjo la elevación de la
cordillera del Himalaya. Otros sistemas montañosos importantes, como los
Pirineos, los Alpes y los Urales también se originaron durante colisiones
continentales.
Límites convergentes
Una de las placas (la más
densa) se introduce bajo la otra en un proceso que se denomina subducción. A
estos límites también se denominan fosas, zonas de subducción y límites
destructivos. Presentan intensa sismicidad y vulcanismo.
Océano-océano (borde oceánico converge con
borde oceánico). En este caso una de las placas se hunde bajo la otra dando
lugar a una fosa oceánica (son las mayores depresiones del planeta). La placa
que subduce (introduce debajo) se funde originando procesos magmáticos y
volcanes en superficie, si éstos son suficientemente altos aparecerán como
islas volcánicas (denominadas arcos islas). Ejemplo de arcos islas son las
Aleutianas, Kuriles, japonesas, Filipinas, Marianas, Antillas, islas de Tonga,
Java, Sumatra, etc. originadas todas ellas por la colisión entre diversas
placas.
- Continente-océano (borde
continental converge con borde oceánico). Es el caso de la costa pacífica de
Sudamérica, donde la litosfera oceánica más densa y delgada se hunde bajo el
continente incorporándose sus materiales al manto. A este proceso se le
denomina subducción. Se produce la formación de fosas oceánicas en la zona de
inflexión de la placa que se curva al subducir. La superficie de contacto entre
la litosfera oceánica y continental es inclinada (45º) y se denomina superficie
de Benioff.
Estas zonas son de gran
actividad sísmica y volcánica. La presión que ejercen las dos placas provoca la
formación de pliegues que dan lugar a cordilleras paralelas a la costa
denominados erógenos peri oceánicos. Los magmas ascienden por las grietas y dan
lugar a una intensa actividad volcánica en la cordillera. Por ejemplo, la
cordillera de los Andes se forma por la convergencia de las placas de Nazca y
la Sudamericana.
- Continente-continente (borde
continental converge con borde continental). Si en una zona de subducción
continente-océano, la placa oceánica que subduce lleva "arrastrando"
un continente, éste se ira acercando al primero hasta que entre en colisión con
él. Los sedimentos que se habían depositado en el océano (ahora desaparecido)
se deforman, dando lugar a una cordillera de grandes dimensiones (erógeno intercontinental)
Este es el caso de la
cordillera del Himalaya, que se origina por la colisión entre la placa Indo
australiana y la placa Euroasiática. También los Urales, Alpes, Pirineos, etc.
¿Qué son los limites
transformantes?
La Tectónica de Placas es una teoría bastante compleja
que afirma que la superficie del planeta está formada por placas litosféricas
que flotan sobre la astenosfera como si fueran un conjunto de cubitos de hielo
dentro de un vaso de refresco. Estas placas, como no se están quietas, se
mueven constantemente, de manera que en unas zonas del planeta tenemos un
movimiento de separación porque entre ellas se está generando litosfera
oceánica nueva (bordes constructivos o divergentes) y en otras regiones tenemos
movimientos de aproximación en los que en algunos casos (no en todos) se
produce la destrucción de litosfera oceánica vieja por subducción (bordes destructivos o convergentes). Pero existe un tercer tipo de límite
de placa poco habitual que se caracteriza porque el movimiento relativo no es
ni de aproximación ni de separación: los bordes transformantes.
Los bordes transformantes son regiones del planeta relativamente
escasas por su inestabilidad (imagen modificada a partir del mapa físico de
clubdating.tk)
LAS FALLAS DE DESGARRE
Cuando hablamos del comportamiento mecánico de las rocas vimos que estas se podían romper si se llegaba a su
límite de rotura. En ese caso se podían producir unas estructuras geológicas
muy importantes a las que llamamos fallas, que pueden ser de tres tipos
principales según cómo sea el movimiento relativo de sus dos bloques. En dos de
ellas (normales e inversas) este movimiento es fundamentalmente en la vertical,
con un labio elevándose o hundiéndose con respecto el otro, pero en las fallas
de desgarre o transformantes ese movimiento de los dos labios es
fundamentalmente en la horizontal, existiendo fallas dextras o
dextralessi el movimiento es hacia la derecha (sentido de las agujas del
reloj) y fallas sinestras o sinestrales si es hacia la
izquierda (sentido opuesto al de las agujas del reloj). De hecho una falla
transformante es básicamente un “desgarre del terreno que conecta dos tipos de
fallas o dos asociaciones de fallas”, ya sean normales, inversas o una de cada
tipo.
Las fallas transformantes se clasifican en dextras o
senestras dependiendo de cuál es el movimiento relativo de los bloques (imagen
propia)
Las fallas de desgarre son
relativamente abundantes en el planeta, en especial las denominadas transformantes
dorsal-dorsal. Este tipo particular de falla de desgarre lo encontramos en
los bordes constructivos segmentando a la propia dorsal en tramos más o menos
cortos de trazo recto. De hecho, dado que las fallas de desgarre en este caso
son más o menos perpendiculares a la propia dorsal, tienden a disponerse
paralelas al movimiento de las placas tectónicas que se separan. Las
transformantes dorsal-dorsal son el tipo más común de falla de desgarre porque
en una misma dorsal se repiten cada 50-100 km, con un salto en la horizontal
que puede ir de decenas de kilómetros a cientos de kilómetros, aunque en casos
excepcionales pueden llegar incluso a los 1.000 km. Estas fallas, que tienen
una actividad sísmica poco profunda, suelen estar marcadas además por surcos en
el fondo oceánico de origen no erosivo.
En los bordes divergentes
tenemos fallas de desgarre que reciben el nombre de transformantes
dorsal-dorsal (modificado a partir de diferentes fuentes)
BORDES ESCASOS Y POCO ESTABLES
En ocasiones las fallas de desgarre no segmentan dorsales,
sino que representan un borde de placa en el que no hay creación ni destrucción
de litosfera. De esta manera los bordes transcurrentes son regiones muy activas
desde el punto de vista sísmico (pero sin procesos de subducción) que dado la
complejidad de la tectónica de placas no son muy estables en el tiempo, por lo
que tienden a desaparecer. Y de igual modo que las fallas transformantes pueden
clasificarse de tres tipos en función del tipo de falla que conectan, cuando
hablamos de bordes ocurre lo mismo, solo que los que conectan dos dorsales (o
dos tramos de dorsal más bien) ya las hemos visto. De esta manera podemos
distinguir dos tipos de bordes transformantes en función del tipo de bordes que
conectan. Por un lado, tenemos las fallas transformantes que conectan dos
límites de tipo convergente y que podemos llamar transformantes
fosa-fosa. Son el tipo más común en el planeta y un ejemplo claro es la
famosa Falla de San Andrés de California (Estados Unidos), situada al este de
la Placa Norteamericana y conectando la Fosa Mesoamericana (al sur) con la Zona
de Subducción de Cascadia (al norte) en un movimiento dextro (imagen que
encabeza esta entrada). Por otro lado, tenemos ejemplos en los que este tipo de
fallas unen un límite divergente con otro convergente y que podemos
llamar transformantes fosa-dorsal. Hay varios casos en la
actualidad, como es la Falla Transformante del Mar Muerto, en la región de
Palestina, que une la Dorsal del Mar Muerto al sur con el borde convergente que
hay entre las placas Arábiga y africana con la Placa Euroasiática en un
movimiento que, a diferencia de la anterior, es sinestro.
Los bordes transformantes los encontramos siempre poniendo
en contacto dos límites de placa convergentes, como ocurre con la famosa Falla
de San Andrés, a la izquierda (fuente: desconocido) o una fosa con una dorsal,
que es lo que ocurre en la región de Israel, a la derecha
son tectónica de placas un
borde divergente es el límite entre dos placas litosféricas contiguas que se
separan. Conforme las placas divergen, nuevo material asciende por procesos
magmáticos desde el manto terrestre, creándose nueva litosfera, por lo que
también recibe el nombre de borde constructivo.
Los bordes divergentes más
activos son los responsables de las dorsales medio oceánicas, donde el eje del
rift medio oceánico marca el límite entre las placas contiguas, y es donde se
forma nueva corteza oceánica que se incorpora simétricamente a cada una de
ellas. La extensión que ocurre en el rift produce fallas normales o extensivas,
que delimitan escalones y grabens o fosas tectónicas paralelos a la dirección
de la dorsal.
Al igual que los bordes convergentes, los bordes
divergentes están asociados a actividad volcánica y sísmica. En las dorsales se
produce la mayor parte del vulcanismo terrestre, y la mayor parte de la lava
que se vierte desde la geosfera, pero es un vulcanismo de tipo fluido que
permanece además oculto bajo el océano. Los terremotos ocurren en asociación
con las fallas normales recientes que definen el rift, y también con las fallas
transformantes, de las que las zonas que constituyen límite de placa están, en
su mayor parte, en las propias dorsales, y son la sede de los seísmos de mayor
magnitud que ocurren en el océano.
Además de límites divergentes,
existen otros dos tipos de límites de placas: los convergentes o subducción y
los pasivos.
6-C4
Identifica las placas
tectónicas que están localizadas en México
La República Mexicana, geológicamente
hablando, es el resultado de múltiples procesos tectónicos llevados a cabo
durante su evolución. El territorio mexicano está situado sobre cinco placas
litosféricas, en cuyos límites encontramos trincheras, centros de expansión y
fallas transformantes. La mayor parte del territorio continental pertenece a la
placa norteamericana, mientras que la península de Baja California pertenece a
la placa del Pacífico; en el litoral del Pacifico se tiene la micro placa de
Rivera, la placa de Cocos, y la del Caribe.
En México el límite que más se
conoce es de tipo transformantes, es la conocida falla de san Andrés la cual se
dice que separara a baja california del resto del país.
7-C4
las placas tectónicas al
moverse causan terremotos, la magnitud de estos se debe de acuerdo a la tensión
que acumulen las placas tectónicas que se encuentran juntas, es increíble
pensar que existen el mundo ese lugar donde se pueda estar en dos placas tectónicas
a la vez y es tan visible en donde se dividen atreves de la falla de san
Andrés, es un paisaje muy bonito, pero es muy peligroso que las placas se
muevan pues es la cusa de los terremotos.
Por otro lado, el movimiento
de las placas no se compara con el movimiento que tuvieron cuando los
continentes se separaron , es difícil pensar que en un futuro lejano los
continentes pueda llegar a estar juntos nuevamente pero todo es posible, que
impresionante es ver también cuando las placas se juntan formando las grandes
montañas que existen en el mudo es un bellísimo paisaje, pero el pensar cómo
fue que se formaron y pensar todo los desastres que se causan al moverse las
placas es terrible.